Translate

lunes, 20 de mayo de 2013

¿Qué es esto?

¡Bienvenido! Si has llegado a parar aquí, te ruego te esperes un momento antes de largarte. Déjame que te explique. 

En un principio pensé en llamar a este blog "Elisa desahogada", o algo así. Pero luego me di cuenta de que podía atraer equívocamente a internautas en busca de porno casero o algo así, y no quería ser la responsable la decepción de tan selecto público. 

Pero el caso es que va de eso. De desahogarse, no de porno, digo. Hasta aquí, nada original, lo sé. Supongo en que la gracia reside en cómo nació este proyecto. Sigo sin captar tu atención, ¿no? Vamos, quédate un poco más. No se está tan mal.

El otro día terminé de leer Las ventajas de ser un marginado. De ahí surgió la idea de este blog. Porque hace poco pasó algo (tal vez más adelante te lo cuente, si eres bueno) y sentí ganas de desahogarme con alguien. Pero no sabía con quién. Porque era el tipo de cosa que no quieres contar a tu familia, y tampoco a tus amigos. Pero necesitas contársela a alguien. Ahí entra el asunto del libro. En Las ventajas de ser un marginado, Charlie envía cartas a un tal "querido amigo" -que en realidad no es amigo suyo- y le cuenta cómo le va la vida. Y eso le ayuda. Aunque el amigo nunca le conteste. Aunque probablemente a él (o ella) le dé igual lo que Charlie le cuenta. Y pensé: yo necesito alguien así. Alguien a quien poder contarle todo, porque no me conoce; no voy a cambiar la opinión que tiene de mí, porque no tiene ninguna. ¿Comprendes? Las ventajas de ser un marginado es un libro del año noventaitantos, y claro, ahora ya nadie envía cartas. Y, de todos modos, ¿para qué? Si busco un desconocido a quien contarle mi historia, ¿qué mejor forma que con un blog?

Así que ahí entras tú. No un "tú" retórico. , la persona que está al otro lado de esta pantalla. Si has llegado hasta aquí, enhorabuena y muchas gracias. Si no, espero que sepas que te estoy haciendo una peineta ahora mismo. Aunque, claro, ¿cómo lo vas a saber si ya te has ido? A lo que voy. Como he dicho, si hago esto es para contarte lo que me pasa. Pero no pienso limitarme a entrar aquí y vomitar en este bonito y diáfano espacio un par de reflexiones pesimistas sobre la mierda que es el amor y esas cosas. Las habrá, supongo, pero intentaré moderarlas. En cualquier caso, como premio a tu perspicacia, voy a tener que ofrecerte algo más.

¿Eso ha sonado a "Elisa desahogada", o solo me lo ha parecido a mí?

A lo que me refería es a que procuraré contarte mi historia de modo entretenido. Está bien, solo tengo una vida normal, supongo que, en general, se parecerá a la tuya. Pero siempre he creído que todo puede ser tan aburrido o tan emocionante como lo sea el modo de contarlo. Así que intentaré hacerlo lo mejor posible. Y te pondré al corriente de quién es quién, con todo el lujo de detalles que quieras. Para que no te pierdas. Aunque precisamente por eso, no puedo arriesgarme a dar nombres reales.

Así que pongamos que me llamo Elisa. 

Bienvenido a esta emocionante y anodina historia que es mi vida. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario